La Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM) cuenta con una estructura compleja en cuanto a su conectividad y movilidad debido al incremento poblacional y los desplazamientos cotidianos que se realizan desde el Estado de México y los límites con Hidalgo y Morelos hacia diversas zonas de la Ciudad de México; principalmente hacia el centro administrativo, político y económico de la Ciudad de México. Ante esto, el sistema de transporte masivo enfrenta una alta demanda. Gran parte de este sistema (SCT Metro, Metrobús, Tren Ligero, Trolebús, RTP) transita en conexión con las alcaldías centrales de la Ciudad: Benito Juárez, Cuauhtémoc, Miguel y Venustiano Carranza.
El proceso de expansión de la ciudad ha traído consigo el desafío de resolver y facilitar la movilidad de los habitantes que se asientan en las zonas alejadas y, con mayor complejidad, el de las personas que habitan en las orillas de la ciudad; lugares caracterizados por contar con cerros y que, en diversos casos, comenzaron a ser poblados a partir de invasiones. En otras palabras: se trata de zonas que paulatinamente han demandado más y mejores servicios públicos y opciones para facilitar su movilidad y sus actividades cotidianas.
Un caso interesante surge del Estado de México, donde se ha implementado transportes hacia las periferias como el Tren Suburbano, el Mexibús y el Mexicable1, respondiendo principalmente a las desigualdades sociales que representan estas zonas y al nexo tan marcado que existe con la zona central de la ciudad.
En las zonas periféricas de la Ciudad de México el sistema es deficiente y está asociado al transporte concesionado, principalmente en zonas de difícil acceso o en lugares accidentados. Derivado de esto, el Gobierno de la Ciudad de México ha implementado el Cablebús para disminuir la desigualdad social que genera un transporte deficiente e impactar positivamente en la calidad de vida y en el desarrollo humano de los habitantes al conectar las zonas periféricas con el centro de la Ciudad de México, para que puedan llegar a centros laborales, recreativos, educativos, de salud y culturales.
En este sentido, la presente investigación tiene como objetivo identificar si a partir de la implementación del Cablebús en las Líneas 1 y 2 se ha mitigado la desigualdad social vinculada a la movilidad en las zonas de influencia donde se encuentran las estaciones, al mejorar el acceso a la ciudad2. Para ello se utilizó un método mixto de investigación que comprendió trabajo de campo (encuestas, entrevistas y grupos focales) y de gabinete (contextualización del problema de investigación y análisis de resultados) con el fin de identificar la percepción de la población usuaria.
El presente trabajo analiza si la implementación del Cablebús en las sierras de Guadalupe (Cuautepec) y Santa Catarina (Iztapalapa), permite a los habitantes de esas zonas mejorar el acceso a la ciudad, disminuyendo su condición histórica de desigualdad e inequidad social.
Este trabajo se estructura con base en cuatro temas principales: