La participación ciudadana en el barrio. El análisis de dos experiencias del Programa Comunitario de Mejoramiento Barrial en la Delegación Azcapotzalco
Como primordial tarea de la Planeación, es comprender las problemáticas que se expresan en el territorio. En el contexto actual resulta complejo, el espacio habitable se va modificando de acuerdo a la toma de decisiones en el ámbito económico y social que se han promovido a lo largo de la historia y que han configurado y transformado el territorio en lugares fragmentados, desiguales y contradictorios, lo cual remite a insuficiencias de la planeación y de la gestión urbana, frente a procesos urbanos complejos, y sobre todo a la consolidación de un espacio social cada vez más polarizado (Coulomb, 1993).
En México, hace cerca de una década dentro de los llamados gobiernos de izquierda en nuestra ciudad, comenzaron a implementarse políticas innovadoras a nivel local que intentan reconstruir, reconfigurar y perfeccionar los componentes de la democracia, por medio de su compromiso a nuevas formas de representación a través de programas que den apertura a espacios públicos u obras que accedan a la ciudadanía abrir camino en la convivencia y reconstrucción del tejido social.
Al respecto Castro Domínguez (2012) comenta que, la combinación de instituciones relaciones, ideas y prácticas de un gobierno, propician formas particulares de subjetividad que al convertirse en prácticas de gobierno matizan las identidades ciudadanas. Las políticas públicas inmersas en mensajes implícitos muestran las formas en que se espera sea ejercida la ciudadanía, al establecer los contenidos de los derechos y deberes ciudadanos.
La cuestión de lo anterior me lleva a preguntarme, si dichas modalidades están construyendo ciudadanía y generando un compromiso con las prácticas democráticas.